Cuenta la Leyenda de la Época Medieval ( Siglo XIV) que, en Montblanc Sant Jordi mató al fiero Dragón que tenía atemorizados a los habitantes, cuando iba a devorar a la última doncella, la princesa Cleodolinda, apareció con su caballo blanco, brillante armadura, y con su espada atravesó al dragón, liberando así a la princesa y a los habitantes de Montblanc. De la sangre del dragón brotó un rosal de las más bonitas rosas rojas, el Caballero cortó una y se la entregó a la princesa. Este gesto ha creado una tradición basada en el amor y la cultura. En estas fechas Montblanc, celebra la Semana Medieval recreando el ambiente de las calles y sus habitantes cómo eran hace 700 años.
En Cataluña la festividad de Sant Jordi data del Siglo XV, según la Leyenda, éste fue un militar romano de origen griego, mártir al negarse a abjurar de su fe (303) . El Rey Pedro de Aragón al invocarle ganó la batalla de Alcoraz, liberando Huesca de los Sarracenos (1096).
Es una de las fiestas más arraigadas en Cataluña, en ella confluyen cultura, amor, amistad, la Leyenda y la devoción por la figura del Santo, patrón de la Comunidad. Al ser la tradición regalar libros y rosas.
También por qué no, es una fiesta de consumismo, esperada por autores, editores y lectores, éstos ávidos por conseguir la firma de su autor preferido, y detenerse en las paradas para ojear las novedades Editoriales, paseando sin prisas, disfrutando del ambiente con el pensamiento en la persona/as a quien quieren obsequiar. A causa del COVID19 este Sant Jordi esto será diferente.
En 1995 la UNESCO instauró el 23 de Abril como DÍa Mundial del Libro, y los Derechos de Autor, esta fecha coincide con la muerte en 1616 de Cervantes, Shakespeare, e Inca Garcilaso de la Vega. También coincide con el nacimiento o muerte de otros autores de renombre, Josep Pla, Manuel Megía Vallejo, y un largo etc…Así mismo se creó el Premio UNESCO de Literatura Infantil y Juvenil en pro de la Tolerancia.
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